miércoles, 7 de julio de 2010

Melchizedek ~ El Fuego del Corazón

Saludos ustedes, hermanos y hermanas de la Tierra. Soy el Melquizedec de la Tierra, antes llamado Maestro Philippe de Lyon. Vengo ustedes para expresarme en palabras simples. El venerado Sri Aurobindo ha explicado en términos de Conciencia, lo que les permitía mantener y encender el Fuego del Corazón. Por mi parte, hablaré en términos simples, en su Vida y en sus palabras diarias, sobre las condiciones previas al encendido inicial de su Fuego del Corazón para los que aún no lo vivieron.

Existe en la persona humana y en su personalidad, obstáculos muy importantes al enfoque de este proceso de la Conciencia. Estos obstáculos no son siempre visibles para el que los tiene en vista ya que éstos participan, para el que es víctima de estos obstáculos, de su método de funcionamiento usual y habitual, de la educación, resultante de heridas (incluidas o incomprendidas, reveladas o veladas) pero que son frenos realmente al establecimiento, en ustedes, de este estado de consciencia Unificada...

Durante mi encarnación insistí con vigor y fuerza el obstáculo más fuerte y algunas veces el más difícil de sobrepasar y que bloquea el acceso a esta luz y al fuego de su corazón. Este es llamado antes que nada, juicio y chismorreo, juicio referido a otros, juicio referido a las circunstancias, juicio referido a los acontecimientos. En realidad todo lo que ha surgido de la actividad discriminante y normal de su mental, de su intelecto, habitual en el seno de la vida humana, en esta dimensión.

Debe, como lo dijo el Cristo, volver a ser como un niño. ¿Qué quiere decir?

Un niño no medita. Un niño no juzga. Un niño define su comportamiento en el momento y no con relación a circunstancias pasadas. Aunque este comportamiento es violento, es resultante de la instantaneidad. Él niño no calcula en función de su interés o en función de una ventaja o de una desventaja. El aprendizaje en est a dimensión, siempre lo ha conducido a evolucionar de esta forma, entre lo que es bueno para ustedes y lo que no es bueno para ustedes. En el seno de un grupo social, qué sea, siempre ha definido sus acciones los unos con relación a los otros, a menudo a través de juicios a los triunfos resultantes de sus propios marcos y sus propios sentimientos o percepciones. Así pues, de mi vida, cuando hablé de juzgar así como lo dijo el Cristo. El juicio en el exterior de sí mismo le condena y le aleja del corazón y, este, eternamente. Cualquiera que sea la intensidad de su planteamiento espiritual, cualquiera que sea su voluntad espiritual y cualesquiera que sean sus ejercicios espirituales, mientras no sean capaces de superar este concepto de juicio, no podrán entrar en el reino de los cielos. No hay ninguna excepción a esta regla.

Entonces, hablar del Fuego del Corazón es algo que es prometido a muchos seres humanos. Pero deben también examinarse a sí mismos, sin falsa vergü enza, sin un no más. Colocarse ante ustedes, observar, de manera meticulosa y precisa, lo que dictan sus comportamientos. Y observarán que, para la mayoría de los seres humanos en encarnación, el comportamiento qué es, está dictado por heridas y experiencias infelices. Sin excepción. Volver a ser como un niño requiere pues de superar las heridas y la experiencia:
vivir en el momento, desnudado de los últimos momentos y sin proyectarse en el momento futuro. Esto es ciertamente el obstáculo principal y el más comúnmente distribuido en la superficie de este mundo: esta dualidad, esta oposición bien/mal que aleja a ustedes de la Verdad. El segundo principio es comprender, con el corazón y con el ojo de la consciencia, que nada de lo que ocurre en el exterior de ustedes, no puede estar ausente en el interior de ustedes. Lo que sus ojos ven, en su familia o en sus cajas de imágenes (TV) no es más que el reflejo de lo que ocurre en su interior. La contaminación de los mares, es la contaminación de su sangre. El aire contaminado, es la contaminación de su aire. No hay distancia alguna. Es el filtro de la ilusión de esta dualidad el que les hace creer que hay una distancia entre vosotros y los demás, entre vosotros y los elementos.

Ustedes son parte integrante de los elementos. Ustedes son parte integrante de esta vida y no solo de lo que ustedes ven y de lo que creen. Así pues, se necesita admitir, comprender y luego integrar, que nada de lo que es exterior puede existir sin contrapartida interna. El poder de análisis y de discriminación del intelecto, es de reagrupar, permanentemente, absolutamente todo, sin excepción, en juicio de valor, en bien o en mal.

Esto es un hábito adoptado desde el primer día de la escuela, yo diría incluso desde el primer día en el seno de la encarnación. El conflicto bien y mal, está más allá de vuestra persona. Es inherente incluso a vuestra existencia de este mundo, de esta dimensión.

Soluciona r la dualidad, el bien y el mal, no puede hacerse luchando en contra. Eso requiere de cambiar su mirada y su opinión.. Eso requiere de elevarle, de pasar a ser hasta cierto punto un propio observador de usted mismo y de este mundo. El principio de acción/reacción, el karma, como dicen los orientales, forma parte de la falsificación de este mundo y la ilusión de este mundo.

¿Cómo querer salir de la ilusión participando en la ilusión, de una manera u otra? Su punto de vista es limitado, asimismo su consciencia está limitada.

No podréis salir de la limitación utilizando las herramientas de la limitación. Jamás. Podrán cultivar en ustedes, la sabiduría, la meditación, las experiencias espirituales, pero eso nunca les permitirá dejar la ilusión. Superar el bien y el mal no es ni hacer el bien ni hacer el mal, es actuar más allá del bien y el mal, por el principio de la Luz y la Unidad.

Pero, si me responderán, ¿cómo acceder a este factor, para aquellos de u stedes que no lo viven? Bueno, lo primero, que os he señalado. No juzgar más y no medir mas. Una vida entera de meditación puede ser devastada por el mal que ustedes digan de alguno.


Eso es visible en nuestros planes sutiles, con relación a la Luz que emiten.

Y eso es una Verdad. Es necesario literalmente que se entrenen en no juzgar, a no ser duales, a no criticar, concerniente a vuestros hermanos y hermanas presentes y ausentes, y también a las circunstancias mismas de su vida. Esto no significa que de cierta manera ustedes puedan acercarse a la resonancia de la unidad y esperar vivir el fuego del corazón. Ninguna enseñanza espiritual, cualquiera que sea, y menos aun, ninguna religión, no puede ser de alguna ayuda para ello. Este camino es un camino que hacéis vosotros mismos, con vosotros mismos, y los demás. Esto requiere de volver a ser un niño y, a la vez, ser un adulto autónomo, consciente. Un adulto que se atreve a observar el momento cara a cara, la relación cara a cara, sin equívoco. Esto requiere esfuerzos de transparencia, y esto también requiere no tratar su interés, cualquiera que sea. Esto requiere literalmente de ustedes deconstruir, (negación del significado normal de los conceptos y favorecimiento de otro tipo de interpretaciones) de ustedes desprogramar, y de ustedes defragmentar (unificar las diferentes zonas de la memoria y dejar lugar vacio en la misma), porque efectivamente el ser humano en el seno de esta dualidad está fragmentado (en piezas).

Existe un conjunto de períodos dispersos que ya no permiten a la luz reflejarse. La luz consecuentemente se distorsiona, y ustedes entran dentro de una percepción alterada, inevitablemente, de lo que ustedes constituyen y de lo que constituye vuestra vida con el otro, con los demás y con el conjunto de lo que fue su vida.

Hay entonces la necesidad de deshabituarse de los reflejos condicionados de defensa, de protección. Hay entonces la necesidad de conducir y dirigir su mente, no por creencias, no por la adhesión a las palabras –fueron los más luminosos- pero, aún mas, de controlar su mente prácticamente, en primer lugar. De pasar una revisión de vuestras acciones, así como lo dijo un día el Maestro Abraham, el día anterior, en orden de identificar los momentos, los momentos, los hechos o las interacciones entre las personas, que no han sido caracterizadas por unidad, los momentos, momentos en que ustedes han estado opacos y no lo suficientemente transparentes. Esto ocurre a todo ser humano, por supuesto, en esta condición, fue la mayor cantidad de ellos en encarnación. Pero este ejercicio es esencial. Aprender a identificar consistentemente sus memorias, hechos, gestos y palabras de sus días.

Trabajando juntos, permitirán a la vibración del Corazón que comience a despertar y permitirle recibir el Fuego de Amor que ustedes son, en verdad.

No olviden que se hace todo en esta densidad para alejar a ustede s de este objetivo que es su objetivo. Se construyó todo se concibió sobre el principio de la dualidad y el miedo, sin excepción. Que eso esté en la relación de pareja, que eso esté en la relación entre un individuo y la sociedad, que eso esté en su trabajo, en sus empleos. Puesto que este mundo fue construido por la acción/reacción, cuyo objetivo es tenerle alejado de la acción de gracia, debe pues extraerse de esta ley de acción/reacción, a su ritmo, con lucidez, a fin de esperar unirse a las esferas de la Unidad.

No necesitan ustedes juzgar o condenar los momentos de opacidad que habéis vivido, de ustedes o de otros, puesto que participan de la experiencia, y como tal, ella tampoco es condenable, cualquiera que sea. Pero en definitiva, supondrá un día, también aquí la transparencia. Pero no obstante deben aprender a discriminar en ustedes, a ustedes, según sus acciones y sus actos, lo que participó en la unidad y lo que no. No para juzgar, sino para iluminar, para que cuando se sometan de nuevo a este mismo tipo de situación, la iluminación anterior venga a modificar sus acciones, reacciones y comportamientos, si no, la lección corre el riesgo de repetirse y de no ser aprendida. Hoy más que nunca, sus progresos están exitosos inmediatamente. Por lo tanto realmente, a este nivel, un estímulo para ir hacia ella. Este estímulo es real y significativo. Será notado por la vibración y un apaciguamiento, una ligereza que contribuya a elevarlos, a elevar su consciencia y vuestras vibraciones hacia el centro y el fuego del amor. Que los lleve a conducir y llevar su vida en su totalidad hacia la traslación dimensional, esta ascensión tan esperada.. Las fuerzas de resistencia y tensión le conducirán siempre en la dualidad. Las fuerzas de abandono y de atracción volverán su vida simple. Todo se realizará en el Estado de gracia, como por Milagro. No carecerán de nada, nunca. Mientras que la vida realizada bajo los principios de la resistencia es una Vida de falta y sufrimiento. Hoy, más que nunca, la acción/reacción será siempre sufrimiento. La acción de gracia será siempre liberación.

Existía un fenómeno de amortización, en los siglos anteriores, que podía hacer, a veces, que algunas acciones podían ver sus reacciones inaparentes e inoperantes en la misma Vida. Hoy, este no será más el caso. Los sectores de interferencias, así nombradas por el venerable Sri Aurobindo, no existen más. Por lo tanto ustedes, están con más razón aún, totalmente libres de elegir la acción/reacción, o la acción de gracia. Pero elegir la acción de gracia les obliga a estar en la gracia a ustedes mismos, a saber perdonar a ustedes y al universo entero a fin de no hacerle sufrir más, a ustedes como al universo entero. La ley de acción-reacción. Su corazón se volverá ligero y, en ese momento, su corazón pasará a ser permeable al fuego del amor.

Ciertamente les ayudamos. Ciertamente los regamos con la fuente.

Ciertamen te si les gusta. Pero nadie podrá hacer este trabajo de limpieza, excepto ustedes. Deben hacer este esfuerzo, mientras se encuentra todavía a tiempo, a fin de acoger este estado de gracia. Muchos seres humanos ven a menudo sus conductas dictadas por el miedo, por la falta, por la incomprensión. En el fuego del amor, es no tener miedo de su muerte, la falta de cualquier pérdida. Porque en el fuego del amor, no puede haber falta ni pérdida. El temor, la falta, la pérdida forman parte de la dualidad y su condición, pero absolutamente no de su vuelta a la unidad. El desafío es a este nivel. En este desafío les ayudaremos, a condición de que ustedes lo hayan situado y a condición de que ustedes lo acepten.

No podemos ir en contra de lo que se ha establecido en esta Dimensión bajo pena de estar nosotros mismos atrapados otra vez en esta matriz. No podemos ir en contra de su libre albedrío involucrando la acción y reacción, pero que no exista absolutamente en el seno de la unidad, ya que en ese momento, descubrirán la verdadera libertad y no al libre albedrío. El libre albedrío está vinculado a la elección y en consecuencia a la dualidad. La libertad está vinculada a la unidad y a las no elecciones. A la Verdad y a su Unidad. Así pues, se acercarán a lo que buscan y lo encontrarán. Pero para eso, deben despojarse, hacer el hogar, examinar todos los ángulos, aclarar sus temores, sus carencias, sus pérdidas. El mundo de la Unidad es un mundo de abundancia, de prosperidad y un mundo donde la sombra ya no existe, ya que pasa por suprimir a sus propias sombras. He aquí las palabras sencillas que creo, serán una ayuda más frecuente para establecerse en esta unidad.

El veneno mas violento que existe no es otro que su manera de proceder en este mundo, porque esto se lo han inculcado y forma parte de su educación que ha hecho todo lo posible para alejarlo de la Unidad. El conjunto de sistema de creencias fue creado para esto y para nada más: En cerrarlos y enajenarlos cada vez más en este mundo y en esta acción y reacción. La acción y reacción es sin fin. El único final está en la libertad y en la acción de gracia. Deberán ustedes acercarse lo más posible a la levedad.

Sus actos, sus conductas, sus gestos, sus relaciones deben volverse suaves.

Es en esta condición que ustedes pueden encender el fuego del corazón y vivir. Cuando mostréis de una manera u otra el miedo, la falta, la pérdida, la insuficiencia, no podréis, cualesquiera que sean sus conocimientos y vuestras vibraciones, ingresar en el espacio sagrado del corazón. Penetrar en el corazón, si me permiten decirlo, es estar sin temor, es ser un guerrero pacífico. Es sobre todo ser humilde. Ser humilde es simple, sin complicaciones y sin complicar. Cosa que destaca su cerebro. Cosa que destaca la sociedad. Pero entiende bien que todo lo que se ha establecido fuera de ustedes (y a veces les obliga a esta dualidad) fue creado por un impulso de mi edo. Miedo de ser privados de la luz, miedo de ser privados de los que sois, en verdad y en Unidad. Y todos estos temores se materializaron fuera de ustedes, en el seno de vuestro cuerpo, por lo que denominan enfermedad, que no son más que las traducciones de sus temores, en definitiva. Estar en Amor, es estar sin miedo. En el Amor, no hay lugar ni espacio para el miedo. Estar en Amor, es vibrar al unísono de la Fuente. En unísono de la Fuente, no hay contradicción. Ni hay ni Sombra, ni Luz. Hay solamente estado de Ser y estado de Vibración. ¿Cómo quieren ir hacia eso?

¿Cómo quieren establecer eso si en ustedes, persiste el mínimo cálculo el mínimo juicio y la mínima falsedad? Eso es imposible. Hoy, en estos tiempos reducidos que vivís, el aprendizaje es mucho más fácil, a condición de que acepten en su alma y Conciencia, en su Corazón, reconocer sus errores. Ya que allí no tienen nunca errores, simplemente luz que transforma y que transmuta. Todo es simple, en el Co razón. Todo es complicado, en la cabeza*. Si algo parece complicado, es que ustedes no son lo suficientemente simples ya que, por el principio de atracción y resonancia, no se les enfrentará sino con lo que está dentro de ustedes. Si tienen miedo del diablo, es que el diablo está en ustedes. Si tienen miedo de lo otro, es que lo otro está en ustedes y ustedes tienen miedo de eso. A partir del momento en que el miedo del diablo o el miedo de lo otro desaparece, se hacen uno con lo otro. Y lo otro no existe más. Y ustedes no existen más. Por fin salieron de la dualidad inexorable.

*Hoy es un tiempo particular ya que este aprendizaje puede hacerse rápidamente*. *Es un aprendizaje que espero les permitirá vivir, y establecer en ustedes el Fuego del Amor, de manera definitiva*. Creed que estamos haciendo todo lo que está a nuestro alcance para facilitar la tarea de la tierra, de sus habitantes y de la totalidad de este sistema solar.

Familiarícense por lo mismo co n las vicisitudes y las complicaciones de la vida que van a vivir pronto, para pasar definitivamente al interior de sí mismos. Sin miedo y sin aprehensión. Recuerden que cuando su mente habla, se vuelven pesados. Cuando su corazón habla, se vuelven ligeros. Ustedes deben de saber si quieren ir hacia lo pesado o hacia lo ligero. Pero no reclamen lo ligero yendo hacia lo pesado. Declarar, es también aclarar en ustedes lo que es opaco y aceptar, una vez más, que no hay culpabilidad, ni culpa, sino simplemente una luz que debe desarrollarse. Deben volver a entrar, así como el Arcángel Miguel lo dijo durante las Bodas Celestiales, de la distancia y la separación, a la coincidencia. Hacer fusionar, en adelante, la personalidad y Êtreté (la esencialidad del ser) para que esta adopte los pedidos de su vehículo y su Vida, de sus percepciones y de sus atracciones. La personalidad es miedo, venganza, sufrimiento, victimización.

En la personalidad, se está seguro que lo otro es responsable de todo, que las situaciones son responsables de todo. Y mientras proyecten al exterior las responsabilidades, no se convertirán nunca en responsables de sí mismos.

Pasar a ser responsable, es disminuir. Es hacer poner en juego el principio de atracción y de resonancia hacia la ligereza y no hacia la densidad. No podrán acceder al Cielo si no vuelven a ser como un niño. Deben volver a aprender a escribir el momento y no reescribir el pasado. Esto es una atención de cada minuto que los conducirán segura y ciertamente a vivir el Fuego del Corazón y el Fuego del Amor. No podrán pretender vivir eso si ustedes cierran las puertas a la levedad. Aquí en palabras, ciertas, más simples, lo que tenga que decirles sobre, hasta cierto punto, la etapa que les conducirá a vivir el Fuego del Amor por primera vez. Si tiene preguntas con relación a eso, podemos juntos intentar de aportar nueva luz.

Pregunta: ¿podría explicar más sobre lo que llama acción de gracia ?

Respuesta: La acción de gracia es una acción para la Alegría y para el Amor, que está privada de toda aplicación e implicación personales, donde ustedes espontáneamente (quienes hagan, a otra parte - hablar, cocinar, ir, escribir -), sin reserva, sin segundas intenciones, sin antes-pensamientos, estando totalmente en lo que se está haciendo.. Sin plantearse la cuestión del resultado, sin plantearse la cuestión de la recompensa, o de la no recompensa. Es hacerlo en la fluidez, sin hacer preguntas. Es escaparse a la acción/reacción. La acción de gracia es la acción liberada, precisamente, de toda última reacción o reacción futura. Es una acción privada de chantaje emocional o de otras formas de chantaje. La acción de gracia, es la acción para la acción, privada de toda reflexión. Esto no es siempre cualquier cosa pero está dictada por la benevolencia, está dictada por el amor al prójimo, está dictada por el amor a la vida, sin referencia a la matriz y a las ilusiones construidas por la sociedad. Es colocarse bajo el principio rector de la luz y de la vida, de la facilidad y la evidencia. Las cosas muy sencillas, ven.

No tenemos más preguntas. Les agradecemos.

Entonces queridos hermanos y hermanas en esta densidad, espero haber aportado una luz con mis simples palabras, sobre lo que es quizás la manera más directa de conducirles a su Templo interior y a vivir el Fuego del Corazón. He aquí lo que tenía deseo de decirles. Pero recuerden sobre todo que el mayor obstáculo que debe vivirse para el fuego del corazón, no es otro que ustedes mismos, en sus aspectos divididos y divididos y que este aspecto dividido y dividido es el reflejo de sus miedos, de las faltas y pérdidas y absolutamente nada más. Pero ustedes no son sus miedos. Ustedes no son sus faltas. Ustedes no son sus pérdidas. Os habéis simplemente identificado a esto porque es más cómodo, en el seno de esta dualidad, de comportarse así inicialmente. Hoy estáis llamado s a manifestar, a crear otra cosa. Esta otra cosa es lo que sois, en realidad, en la unidad. Pero no pueden mantener la dualidad y establecer la unidad al mismo tiempo.

Tendrán que seleccionar. Se necesita realmente elegir. Hace casi dos años de su tiempo terrestre, se había hablado de enfrentamiento. Hoy, muchos de seres humanos han hecho la elección consciente de la luz. Aunque establecer una elección no es suficiente. También hay que establecer su consciencia en la luz y en el fuego del amor. Queridos hermanos y hermanas, lo que yo tenía que darles. Les deseo lo mejor y más ligero y les digo hasta muy pronto. Que todo el amor del Melquizedec les acompañe en su obra. Los bendigo.



9 de enero de 2010
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Canalizado por Jean-Luc AYOUN
Transcripción por Véronique LORIOT

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