NAVE ALFA "La compasión por los animales"

18 de Marzo del 2010


Que Dios bendiga vuestra inofensividad y vuestro amor y compasión por vuestros hermanos los animales, que no están aquí para ser alimento vuestro, sino para llevar adelante su propia evolución en el planeta.

¡Saludos desde la Nave Alfa!

Hemos estado observando con extrañeza la preocupación de muchos de los habitantes de la Tierra, debido a su incertidumbre respecto a lo que va a pasar en el 2012, según fue predicho por los mayas. Los mayas son descendientes directos de los Atlantes, y han tenido siempre una conexión muy especial con algunas civilizaciones del espacio exterior, sobre todo con los Pleyadianos y los Cisnes. De Ellos obtuvieron muchísima información, sobre la división del tiempo en meses y días, sobre el origen del ser humano de este planeta o sobre los diferentes ciclos que en forma circular se van repitiendo para los distintos reinos que pueblan el planeta Tierra. Así mismo, también fueron adiestrados en el arte de predecir el futuro, llegando a realizar con aguda precisión acontecimientos que se han ido cumpliendo hasta ahora.

Una de sus predicciones, tal vez la más conocida y que pesa más sobre el ser humano terrestre por su actualidad y la importancia de ese acontecimiento, es el cambio a nivel planetario que vivirán todos los seres vivientes de Gaia, que ocurrirá, siempre según sus predicciones, el 21 de Diciembre del 2012. Este hecho ha provocado que muchas personas estén muy ansiosas e incluso hayan entrado en pánico, porque piensan que en esa fecha podría sobrevenir el Fin del mundo, la fecha bíblica del Apocalipsis revelado por el apóstol de Jesús, el Amado Juan.

Queridos hermanos del planeta Tierra, esto no será así. Despréndanse de esos miedos y temores, porque el hombre y la mujer no van a desaparecer de la faz del mundo, así como tampoco sus hermanos pequeños los animales, ni las plantas, ni los minerales, ni el agua, ni la atmósfera respirable. ¡Cómo les gusta a los cineastas hacer películas catastrofistas o post-catastrofistas, donde muestran al público un mundo destruido por un holocausto nuclear, por los agentes de la naturaleza que azotaron las costas continentales, por lluvia de flamígeros meteoros o por la colisión de la Tierra con un asteroide vagabundo!

¡Nada de esto va a ocurrir! El mundo no se va a aniquilar, ni tampoco sus habitantes. Lo que sí va a haber es un cambio de paradigma, una mutación de la situación que ha sufrido el ser humano y el animal desde tiempos inmemoriales, simplemente porque esto no podía seguir ya por más tiempo. Gaia no podía continuar sufriendo el maltrato y el deterioro de Su Cuerpo por parte del ser humano, que no ha tenido contemplaciones a la hora de contaminar y corromper su atmósfera, sus mares y sus ríos, con tal de satisfacer sus deseos egoístas y promover los beneficios económicos de tan sólo unos pocos.

El ser humano de este planeta también ha incurrido en una grave falta contra su Madre Tierra (con lo que ha aumentado el karma negativo que deberá equilibrar de alguna manera) maltratando y asesinando a sus hermanos menores los animales. A pesar de ser superior el hombre en la escala evolutiva, ha hecho servir su inteligencia para inventar cada vez nuevas formas de masacrar y torturar al noble reino animal, que en su pobre inocencia no es capaz de competir con la inteligencia de su hermano mayor, el ser humano.

Una organización para la defensa de los animales tiene un slogan que dice: “Si las paredes de los mataderos fuesen transparentes, todos los hombres se harían vegetarianos”. La crueldad de algunos seres llamados “inteligentes” para con los animales es inconcebible en un ser pensante. No se explica cómo pueden permanecer impertérritos ante el sufrimiento que infringen a esos pobres animales diariamente, como gallinas, conejos, gansos, cerdos, caballos y vacas, que mantienen a veces en espacios tan pequeños que no pueden ni moverse, les obligan a comer casi hasta reventar o los mantienen siempre con luz artificial, para que no sepan si es de día o de noche y tenerlos así desorientados y engañados.

¿Y todo para qué? Para satisfacer el paladar, el gusto por la carne de millones de personas, a los que la ciencia médica ha hecho creer que si no se comen la carne de los animales carecerán de los nutrientes necesarios para sobrevivir. ¡Menuda falacia! Cuántas personas hay en el mundo que han despertado su conciencia y su compasión por los animales, y continúan viviendo, y además muy sanamente, ingiriendo frutas, verduras, legumbres, frutos secos, etc. ¡Y tienen unos cuerpos muy saludables, sin los problemas gástricos y arteriales que provoca la digestión de los trozos de carne de animales muertos que ingieren! La mente de los vegetarianos también se mantiene más aguda y alerta con la llegada de la edad madura; su conciencia se mantiene más despierta y más en comunicación con su intelecto, y su intelecto con una mejor conexión con su mente, facilitando así el contacto con su Yo Superior.

Tú que has despertado o estás despertando, ¡no le sigas el juego a las empresas cárnicas, a las compañías peleteras o a los laboratorios donde utilizan a pobres animalitos para experimentar con ellos! Demuestra que has despertado a la compasión y el amor por el reino animal, y contribuirás con ello a la disminución del karma negativo de la humanidad del planeta. Además, a nivel individual, contribuirás a la mejora de tu salud física y mental y alargarás el período de vida de tu cuerpo mortal, al no verse expuesto a los venenos que forma la carne de animales muertos durante su proceso de descomposición dentro de tu cuerpo físico, y al no ingerir también la adrenalina que desprenden ellos cuando se aterran comprendiendo que van a ser asesinados.

Que Dios bendiga vuestra inofensividad y vuestro amor y compasión por vuestros hermanos los animales, que no están aquí para ser alimento vuestro, sino para llevar adelante su propia evolución en el planeta.

kris-Won
Amor y Paz