miércoles, 29 de abril de 2009
TUS VIEJOS, DESGASTADOS... Y MARAVILLOSOS ZAPATOS INTERDIMENSIONALES
Canalizado en vivo los días 11/12-04-2009
(Freiburg, Alemania)
Es conveniente destacar que el texto que sigue no es una trascripción exacta y literal de la canalización en vivo, puesto que las palabras canalizadas verbalmente poseen una calidad energética que no necesariamente puede llegar a ser plasmada por escrito. En virtud de ello, Mario Liani ha vuelto a canalizar a Kryon para realizar los ajustes necesarios para que el texto mantenga la coherencia necesaria y el mensaje pueda ser procesado cabalmente por el lector que no estuvo presente en el evento en vivo.
PARTE 1
11-04-2009
La primera parte de esta canalización fue dada durante el primer día (11 de abril) de la 2ª Conferencia Internacional de Kryon
celebrada en Freiburg, Alemania. La intervención de Mario Liani - que comenzó a las 14:00 horas y concluyó a las 15:30 - incluyó una conferencia, meditación y finalmente la canalización, la cual duró aproximadamente unos 40 minutos.
La canalización estuvo musicalizada por el músico frances Eric Aron.
La Voz de Kryon…
Yo Soy Kryon, en Servicio Magnético para toda la Humanidad.
El velo nuevamente se abre… el velo ínterdimensional nuevamente se corre… para que estemos aquí.
Ya lo escucharon en esta maravillosa visualización: ésta es una Reunión de Almas… en Familia.
Aquí estamos todos… y todos no son solamente ustedes: aquí estamos… TODOS. Aquellos que ustedes no pueden ver y quizás puedan sentir, están aquí ahora con nosotros.
Es una gran reunión de Familia, porque el ser humano y el ser ínterdimensional son UNO. No lo olviden.
Así es como el increíble y maravilloso ser humano acude nuevamente al encuentro de si mismo...
¿Qué ves en tus pies?
Oh mi querido ser humano, voy a hablar contigo ahora, voy a hablar directamente contigo. Me dirigiré ahora a ti… a ti, que estás sentado en esa silla…
Te voy a pedir que por un momento mires tus pies. ¿Qué ves? No es nada asombroso lo que verás en tus pies… Verás un calzado, unos zapatos…
Observa con detenimiento tu calzado, más no lo mires con tus ojos físicos. Procura mirarlo con tus ojos ínterdimensionales. Si pudieras verlo con esos ojos y con esa mirada… Yo te voy a explicar lo que estarías viendo…
Estarías viendo un calzado sucio, polvoriento, arañado, lleno de golpes… y quizás te preguntes: “¿Por qué el calzado que yo estoy usando se ve tan gastado? ¿Por qué, Kryon?”.
¡Porque has caminado mucho con esos zapatos! ¡Has derribado muchos obstáculos! Algunas veces has tenido que derribar ciertos obstáculos a puntapiés. Otras veces has caminado tanto, tanto, tanto… que tus suelas parecían tener el grueso de un hilo… pero allí están.
¿Por qué crees que ha sido así, querido humano? Porque es necesario que camines, camines y camines… persiguiendo tu propia verdad.
Siguiendo a unos o conduciendo a otros… a través del Camino
Durante ese largo recorrido, muy probablemente ni siquiera recordabas por qué caminabas y hacia donde caminabas. Pareciera que algo te puso en marcha, que algo te impulsó para que recorrieras una determinada senda.
Algunas de esas veces te pusiste en marcha por tu espontánea voluntad… más en otras oportunidades seguiste a otros, porque los viste caminar por una senda y sentiste el deseo de seguir el mismo camino. No tiene mucha importancia si seguiste a otros o si los condujiste… Lo importante no era eso. Lo importante era “El Camino”.
Así es como tú, ser humano, empiezas a recordar que fue lo que activó en ti la necesidad de emprender ese caminar…
En busca del profeta de otros tiempos
Quizás recuerdes que hace mucho tiempo, vivías en una pequeña aldea, en una muy retirada y pequeña aldea de tu provincia o región. Y un día alguien llegó de visita a tu aldea. Ese día llegó un extranjero con una noticia, con una buena nueva…
Ese extranjero te dijo - a ti y a los que estaban reunidos contigo - que traía una gran noticia: “He escuchado hablar acerca de un profeta” - dijo - “He escuchado hablar de alguien que habla con la voz de Dios, ¡que dice estar ungido por Dios!”.
Sus palabras sembraron la curiosidad y el interés en ustedes, al punto que todos estaban deseando ir a escuchar las palabras de ese hombre.
Entonces, tú - ser humano - te preguntaste: “¿Por qué no ir a escuchar en la boca de ese profeta… la voz de Dios? ¡Yo necesito escuchar la voz de Dios! ¡Yo deseo que Dios hable directamente conmigo!”.
Y así, ese humano que tú eras y sigues siendo… se colocó en marcha, emprendió el camino… Y sin saberlo, te colocaste el calzado ínterdimensional que toda la vida te ha pertenecido y te ha acompañado. Ese calzado ínterdimensional le puso prisa a tus pies e hizo que otros también sintieran el mismo llamado.
En esa lejana época te pusiste en marcha solamente con la fuerza de tus piernas… ¡nada más! ¡Ah…! Así ocurrió Porque la voluntad que tú tenías de escuchar directamente la palabra de Dios en tu corazón era tan grande… ¡que cualquier sacrificio hubiera valido la pena!
Es así como tú llegaste adonde tenías que llegar: conduciendo a otros contigo, a otros que tenían la misma curiosidad que tú tenías, la misma necesidad de saber…
Y así tu corazón se nutrió de amor y conocimiento, de inspiración y esperanza para seguir recorriendo ese camino que tantas veces has recorrido con la misma intención…
De esa manera, ese increíble y maravilloso ser humano que tú eres - después de haberse nutrido por la voz del Espíritu - regresó nuevamente a su ciudad, a su poblado, a su hogar... y comenzó a entusiasmar a otros, pues él sintió que tenía algo muy importante que comunicar…
Verificando la exactitud de una “leyenda urbana”
Y así es como el ciclo se va repitiendo… tal como un día seguiste a unos… otro día condujiste a otros…
Y como siempre ha ocurrido, así ocurre ahora… pero con unas pequeñas diferencias.
En aquella época lejana tú escuchaste aquello que hoy se llama “una leyenda urbana”: alguien hablaba de algo, pero había que ir para sentirlo y atestiguarlo.
Sin embargo, ahora te hago una pregunta: ¿qué crees tú que hubiese pasado si ese alguien que hubiera llegado a tu casa ese día, hubiese dicho: “¡He escuchado que hay cinco profetas hablando todos con la voz de Dios!”. ¿Qué hubieses pensado tú en ese momento? Seguramente ya sabes lo que te voy a decir…
En esa época, hubieses pensado: “¡No! ¡No puede ser! ¡No puede haber cinco personas hablando al mismo tiempo con la voz de Dios! Uno de ellos debe ser el original y los otros cuatros seguramente son falsos”.
¿Por qué crees que pensabas así, querido ser humano?
Ni originales… ni falsos profetas
Porque era tu energía del momento la que no te permitía pensar de manera diferente, porque era tu sistema evolutivo el que no te permitía aceptar algo más…
Muy probablemente te hubieses preocupado por informarte acerca de saber quien era considerado “el original” y quienes podían haber sido “los falsos profetas”… ¡Ah! Pero eso ocurrió hace mucho tiempo… y tus zapatos ínterdimensionales - que están gastados - lo atestiguan… y si están gastados, tú sabes cuanto camino han recorrido…
Y tú, humano, sabes - por tu larga experiencia - de que ahora no ocurre lo mismo que ocurría antes. Ahora las cosas son diferentes…
Has escuchado una leyenda urbana, la has visto publicada en Internet… De hecho, cada milésima de segundo (Kryon chasquea tres veces los dedos) alguien publica una nueva leyenda urbana en Internet.
Cinco humanos hablando con una sola voz
Escuchaste que vendrían 5 humanos a hablar en nombre del Espíritu, pero estamos seguros de que nunca te cuestionaste… ¡si habría un original y cuatro falsos! ¿Por qué crees que eso pasó, mi querido? ¡Es muy simple! Porque tu nivel evolutivo - ése que ha ayudado a elevar el nivel evolutivo de la toda humanidad - ha originado en tu corazón la comprensión de que esto que está ocurriendo ahora es ínterdimensional. Por ello lo aceptas y lo comprendes sin cuestionarlo.
¿Qué queremos decir con ínterdimensional? Es muy simple: varias personas sentadas en una sola silla, hablando con una sola voz. ¿Humanos? Sí. ¿Expresándose con voz humana? Sí. Pero con un solo espíritu, un solo propósito y una sola conexión.
No habías visto algo así antes, no tenías experiencia de ello y sin embargo ¿por qué ahora lo aceptaste? Es muy simple, querido: ¡porque tú has cambiado! Porque ese largo recorrido que ha gastado la suela de tus zapatos ha logrado ese milagroso efecto.
Y así es como ese maravilloso e increíble ser humano mira a sus pies… ¿Y qué es lo que ve? Ve un maravilloso par de sucios y maltratados zapatos. “¡Oh, cuánto orgullo siento por ellos!” - dirías.
¡No lustres mis zapatos, por favor!
Creo que te sentirías mal si miraras hacia tus zapatos y los vieras relucir como nuevos, como si nunca los hubieses utilizado, ¿verdad? Muy probablemente ahora estés mirando de reojo - hacia la izquierda y la derecha de tu realidad de vida - para ver en qué estado están los zapatos de los demás. En realidad poca importa lo que veas, porque más bien es muy probable que tú hayas ayudado mucho a que los zapatos de otros también se hayan “ensuciado”…
Te voy a decir más… Quizás, si se te acercara una persona y te preguntara si puede lustrarte los zapatos, le dirías “¡No! ¡No toques mis zapatos! ¡Están muy bien así! Así los quiero”.
Qué extraño es este mundo espiritual, ¿verdad? Pero es así que nosotros nos valemos de la cotidianidad junto a ustedes y también podemos reírnos de ella junto a ustedes…
Querido humano, permíteme seguirte hablando acerca de los zapatos, pues creo que a partir de hoy, cuando dirijas tu mirada hacia tu calzado, ya no vas a sentir lo mismo que antes…
Tal como orgullosamente admiras y te sientes feliz por el estado en que se encuentran tus zapatos, ¿no te parece extraño que alguna vez hayas querido quitártelos definitivamente? Como se dice coloquialmente, pudiste haber dicho: “Voy a colgar mis zapatos”, lo cual significa que quisiste decir algo así como: “¡Renuncio!”.
Ah, probablemente esto haya ocurrido en alguna que otra época oscura de tu proceso evolutivo atemporal o de tu vida actual, tiempo en el cual, con sólo imaginarte que tendrías que ponerte esos zapatos y caminar con ellos… sentiste un absoluto rechazo. Más sin embargo - aunque tú no quisieras ponerte esos zapatos - irremediablemente siempre permanecieron delante de ti… al alcance de tu vista.
Qué asustador es no querer hacer algo y sin embargo, tener siempre - durante toda la vida - un permanente recordatorio. “No quiero, pero allí está… pues siento esa presión”.
Son tan viejos y se ven tan gastados… ¡pero son tan cómodos!
Seguramente debes hacer percibido que estos peculiares zapatos ínterdimensionales se sienten igual que un par de zapatos terrenales… ¿No te ha pasado - querido humano - que cuando posees un par de zapatos que amas mucho, no te importa que sean viejos y gastados? Te parecen tan cómodos… Al mirarlos, te dices o decías: “Cuánto he caminado con ellos… Se ven tan viejos y gastados… ¡pero no los voy a botar!”.
Y así es como tú, mi querido ser humano, te encuentras aquí hoy, en este lugar, simplemente contemplando con gran orgullo tus zapatos, porque sabes que una vez más ellos cumplieron su función, pues te trajeron hasta aquí.
Aquí ocurre lo que siempre ocurre cuando el ser humano está feliz: el ser humano corre y baila de alegría… pues muy contento viniste corriendo hacia este maravilloso encuentro que teníamos reservado para ti el día de hoy y el día de mañana (haciendo referencia al sábado 11 y al domingo 12 de abril de 2009).
¿A cuántos arrastraste contigo? Ya te oigo decir: “¡Pónganse sus zapatos! ¡Vamos nuevamente a caminar!”. Y así es como tú, ser humano, ayudas a otros a caminar… Antes de que tú le digas a otra persona adonde tiene que ir, procura decirle que posee un par de zapatos especiales. Dile que mire sus zapatos y que intente percibir la añoranza de esos tiempos en que los usó muchísimo. Dile que el propósito no es marcar una dirección a seguir. El propósito es… simplemente caminar.
Todo aquello que ustedes hacen en la vida es caminar, caminar y caminar… Durante ese largo caminar siempre hay lugares donde detenerse y donde conversar con otros… lugares donde se hace necesario realizar una parada. Por lo tanto, mi querido humano, no importa que te detengas en el camino alguna que otra vez. ¡Es bueno y necesario descansar!
De vez en cuando, dale un respiro a tus zapatos. Consérvalos con cariño y diles que cuando recuperes tu aliento o tu fe, los calzarás de nuevo para continuar el viaje.
Tu propia voz te recordó despertar…
Y así es como el ser humano se puso en marcha nuevamente, buscándose a sí mismo, necesitando oírse a sí mismo a través de otra voz. ¡Qué paradójico es que tú, humano, hayas colocado el despertador para ser despertado más adelante por tu misma voz! Y cuando tu propia voz te despierta, nunca la reconoces… pues crees que alguien más programó esa llamada para ti.
Sin embargo, estamos seguros de que tú estás aquí ahora porque decidiste usar tus zapatos y marcaste la hora correcta para llegar y despertarte aquí hoy… Estás ahora aquí oyéndonos, más poco importa este diálogo, pues lo que interesa es que sientas el llamado que hay para ti. Ese llamado es silencioso y solamente lo vas escuchar tú… en tu corazón. Ese llamado pudiera ser un recordatorio o un verdadero llamado a despertar para ponerte en marcha o simplemente representaría el consuelo de saber que te encuentras recorriendo el camino correcto, no el camino que otros esté siguiendo o marcando... sino tu propio camino, el camino que tus zapatos saber recorrer.
En vista de que tú, ser humano, escuchaste una leyenda urbana y te pusiste en camino, estás aquí ahora esperando sentir… o tal vez sintiéndolo todo. Estamos seguros de que tu corazón sabrá reconocer - a lo largo de estas horas que pasemos juntos - que todos los mensajes que irás a escuchar sean transmitidos por “la misma voz” (haciendo referencia a las otras canalizaciones que irían a ofrecer los otros voceros de Kryon)...
Aunque el canalizador se levante… ¡la silla permanece “ocupada”!
Esa voz proviene de “esta silla”, no de esta silla física, sino de una silla donde cada uno de estos voceros se sentará para que nosotros podamos brindarte aquello que vinimos a darte hoy…
Cuando este vocero se levante de esta silla… ¡nosotros seguiremos estando sentados aquí! ¡No lo olvides!
Queremos que tú sepas, mi querido humano, que valoramos muchísimo tu esfuerzo y tesón por haber acudido a escucharte a ti mismo. Agradecemos tu valor, tu confianza y te aseguramos que siempre estamos contigo, que tú nunca estás solo.
Yo no puedo despedirme de ustedes, porque en realidad no me voy a ninguna parte. Estaré aquí todo este tiempo junto a ustedes…
¿Sabes algo, querido humano? Yo también tengo mis zapatos y hoy me puse los mejores que tengo, especialmente para ti.
Bendito seas, ve en paz. Te bendecimos con mucho amor…
Y así es.
Kryon
Canalizado por Mario Liani
PARTE 2
12-04-2009
La segunda parte de esta canalización fue dada durante el segundo día (12 de abril) de la 2ª Conferencia Internacional de Kryon celebrada en Freiburg, Alemania, al final del evento - entre las 18:00 y las 19:00 horas - momento durante el cual se ofreció al público asistente una multi-canalización con los 5 canales de Kryon presentes físicamente (la primera que se haya hecho en Europa). Cada uno de ellos tuvo a disposición 10 minutos. Mario Liani fue el primero en canalizar, abriendo el discurso energético con lo que a continuación sigue…
La Voz de Kryon…
Nosotros somos Kryon, en Servicio Magnético para toda la Humanidad.
Y seguimos aquí… No nos hemos ido. Esto continúa…
Esto empezó hace mucho, no solamente hace dos días (haciendo referencia al comienzo del evento internacional de Kryon que comenzó el 11 de abril de 2009)…
Empezó mucho antes, querido humano. Empezó cuando tú manifestaste tu intención de estar aquí con nosotros, cuando anhelaste poder oír el mensaje que al final escuchaste durante estos dos días… porque el mensaje o los mensajes que escuchaste, fueron personales… estaban destinados sólo para ti.
Cinco humanos… y una sola voz
Te estábamos esperando. Estas sillas fueron calentadas por nosotros antes de que tú llegaras. Pero aunque tú no lo creas, ínterdimensionalmente tú también calentaste estas sillas… sin saberlo. Te ocupaste de darle amor y energía a este lugar que pronto te recibiría en tu plena humanidad, para sentirte algo más cerca… del Hogar.
Y así es como - desde tu silla - estás viendo a humanos sentados en otras sillas. Y aunque tus ojos humanos vean cinco sillas… no hay cinco sillas: hay UNA SOLA SILLA. Esta silla es única e ínterdimensional, porque aquí no hay cinco humanidades sentadas con una sola voluntad, con una sola intención.
Esta energía que ustedes y nosotros hemos creado es única, es muy especial, pues se nutre del sentido de la unión y la cooperación que hizo posible que nos integráramos para escuchar todo lo que teníamos que escuchar: el mensaje que proviene de ustedes hacia nosotros y el de nosotros hacia ustedes.
¿Te pusiste nuevamente tus viejos zapatos?
Porque cuando tú, humano, acudiste aquí a escuchar un mensaje canalizado… en realidad viniste a realizar un intercambio, donde tu parte humana se conectó con tu parte angelical y juntos pactaron la necesidad de comunicarse mutuamente.
Es así como ese ser humano viene al encuentro de sí mismo… sin saberlo. Es apenas tu intuición la que te puso en marcha… Son apenas los zapatos que usaste en este viaje, los que te recordaron que era hora de ponerte en marcha.
La melodía del amor y la compasión infinita
Aquí estás sentado, sintiendo la energía de una sola silla, sintiendo la voz que canta una sola melodía: la del amor y la compasión infinita. Es la melodía que tú necesitabas oír y recuperar para sentir que estás en casa. La voz que estás escuchando es tu propia voz, amplificada a una cifra numéricamente imposible de cuantificar… pero es tu propia voz.
Con tu propia voz, mi querido humano, te digo lo siguiente: esta silla que tú estás viendo, tiene un nombre y su nombre es INTEGRIDAD. Es la integridad que hace falta para emprender “El Camino”, porque ningún camino sin integridad ni corazón… se puede recorrer completamente.
Un camino con integridad
Observa la integridad que hay a tu alrededor, recuerda la integridad que pudo haber revestido tus actos y pregúntate en qué momentos sentiste haberte conducido a través de esa poderosa energía. Es “integridad” lo que te hace saber o sentir que no importa lo que digan o comenten de ti… mientras sientas que estás en el camino correcto. Es “integridad” aquello que nos pone (a todos, ustedes y nosotros) en el camino de la búsqueda constante de nuestra propia verdad, pues nuestra propia verdad necesita de nuestra propia integridad.
Nosotros vemos y sentimos tu propia integridad, te amamos por ello y te bendecimos, mi querido ser humano. ¡Oh cuánto, cuánto te amamos! Es por eso que hoy estamos aquí, seguimos aquí a tus pies… y todavía no nos hemos ido.
…Y esto continúa (haciendo referencia a los siguiente canales de Kryon que tomarían sucesivamente la palabra), porque quiero que sepan que en la ínterdimensionalidad no hay despedidas.
Y es así como - a pesar de que la energía de Kryon pasa de una voz humana a otra - ella sigue conteniendo y evocando la misma amorosa energía: la voz de Kryon que sigue resonando en tu corazón…
Kryon
(Freiburg, Alemania)
Es conveniente destacar que el texto que sigue no es una trascripción exacta y literal de la canalización en vivo, puesto que las palabras canalizadas verbalmente poseen una calidad energética que no necesariamente puede llegar a ser plasmada por escrito. En virtud de ello, Mario Liani ha vuelto a canalizar a Kryon para realizar los ajustes necesarios para que el texto mantenga la coherencia necesaria y el mensaje pueda ser procesado cabalmente por el lector que no estuvo presente en el evento en vivo.
PARTE 1
11-04-2009
La primera parte de esta canalización fue dada durante el primer día (11 de abril) de la 2ª Conferencia Internacional de Kryon
celebrada en Freiburg, Alemania. La intervención de Mario Liani - que comenzó a las 14:00 horas y concluyó a las 15:30 - incluyó una conferencia, meditación y finalmente la canalización, la cual duró aproximadamente unos 40 minutos.
La canalización estuvo musicalizada por el músico frances Eric Aron.
La Voz de Kryon…
Yo Soy Kryon, en Servicio Magnético para toda la Humanidad.
El velo nuevamente se abre… el velo ínterdimensional nuevamente se corre… para que estemos aquí.
Ya lo escucharon en esta maravillosa visualización: ésta es una Reunión de Almas… en Familia.
Aquí estamos todos… y todos no son solamente ustedes: aquí estamos… TODOS. Aquellos que ustedes no pueden ver y quizás puedan sentir, están aquí ahora con nosotros.
Es una gran reunión de Familia, porque el ser humano y el ser ínterdimensional son UNO. No lo olviden.
Así es como el increíble y maravilloso ser humano acude nuevamente al encuentro de si mismo...
¿Qué ves en tus pies?
Oh mi querido ser humano, voy a hablar contigo ahora, voy a hablar directamente contigo. Me dirigiré ahora a ti… a ti, que estás sentado en esa silla…
Te voy a pedir que por un momento mires tus pies. ¿Qué ves? No es nada asombroso lo que verás en tus pies… Verás un calzado, unos zapatos…
Observa con detenimiento tu calzado, más no lo mires con tus ojos físicos. Procura mirarlo con tus ojos ínterdimensionales. Si pudieras verlo con esos ojos y con esa mirada… Yo te voy a explicar lo que estarías viendo…
Estarías viendo un calzado sucio, polvoriento, arañado, lleno de golpes… y quizás te preguntes: “¿Por qué el calzado que yo estoy usando se ve tan gastado? ¿Por qué, Kryon?”.
¡Porque has caminado mucho con esos zapatos! ¡Has derribado muchos obstáculos! Algunas veces has tenido que derribar ciertos obstáculos a puntapiés. Otras veces has caminado tanto, tanto, tanto… que tus suelas parecían tener el grueso de un hilo… pero allí están.
¿Por qué crees que ha sido así, querido humano? Porque es necesario que camines, camines y camines… persiguiendo tu propia verdad.
Siguiendo a unos o conduciendo a otros… a través del Camino
Durante ese largo recorrido, muy probablemente ni siquiera recordabas por qué caminabas y hacia donde caminabas. Pareciera que algo te puso en marcha, que algo te impulsó para que recorrieras una determinada senda.
Algunas de esas veces te pusiste en marcha por tu espontánea voluntad… más en otras oportunidades seguiste a otros, porque los viste caminar por una senda y sentiste el deseo de seguir el mismo camino. No tiene mucha importancia si seguiste a otros o si los condujiste… Lo importante no era eso. Lo importante era “El Camino”.
Así es como tú, ser humano, empiezas a recordar que fue lo que activó en ti la necesidad de emprender ese caminar…
En busca del profeta de otros tiempos
Quizás recuerdes que hace mucho tiempo, vivías en una pequeña aldea, en una muy retirada y pequeña aldea de tu provincia o región. Y un día alguien llegó de visita a tu aldea. Ese día llegó un extranjero con una noticia, con una buena nueva…
Ese extranjero te dijo - a ti y a los que estaban reunidos contigo - que traía una gran noticia: “He escuchado hablar acerca de un profeta” - dijo - “He escuchado hablar de alguien que habla con la voz de Dios, ¡que dice estar ungido por Dios!”.
Sus palabras sembraron la curiosidad y el interés en ustedes, al punto que todos estaban deseando ir a escuchar las palabras de ese hombre.
Entonces, tú - ser humano - te preguntaste: “¿Por qué no ir a escuchar en la boca de ese profeta… la voz de Dios? ¡Yo necesito escuchar la voz de Dios! ¡Yo deseo que Dios hable directamente conmigo!”.
Y así, ese humano que tú eras y sigues siendo… se colocó en marcha, emprendió el camino… Y sin saberlo, te colocaste el calzado ínterdimensional que toda la vida te ha pertenecido y te ha acompañado. Ese calzado ínterdimensional le puso prisa a tus pies e hizo que otros también sintieran el mismo llamado.
En esa lejana época te pusiste en marcha solamente con la fuerza de tus piernas… ¡nada más! ¡Ah…! Así ocurrió Porque la voluntad que tú tenías de escuchar directamente la palabra de Dios en tu corazón era tan grande… ¡que cualquier sacrificio hubiera valido la pena!
Es así como tú llegaste adonde tenías que llegar: conduciendo a otros contigo, a otros que tenían la misma curiosidad que tú tenías, la misma necesidad de saber…
Y así tu corazón se nutrió de amor y conocimiento, de inspiración y esperanza para seguir recorriendo ese camino que tantas veces has recorrido con la misma intención…
De esa manera, ese increíble y maravilloso ser humano que tú eres - después de haberse nutrido por la voz del Espíritu - regresó nuevamente a su ciudad, a su poblado, a su hogar... y comenzó a entusiasmar a otros, pues él sintió que tenía algo muy importante que comunicar…
Verificando la exactitud de una “leyenda urbana”
Y así es como el ciclo se va repitiendo… tal como un día seguiste a unos… otro día condujiste a otros…
Y como siempre ha ocurrido, así ocurre ahora… pero con unas pequeñas diferencias.
En aquella época lejana tú escuchaste aquello que hoy se llama “una leyenda urbana”: alguien hablaba de algo, pero había que ir para sentirlo y atestiguarlo.
Sin embargo, ahora te hago una pregunta: ¿qué crees tú que hubiese pasado si ese alguien que hubiera llegado a tu casa ese día, hubiese dicho: “¡He escuchado que hay cinco profetas hablando todos con la voz de Dios!”. ¿Qué hubieses pensado tú en ese momento? Seguramente ya sabes lo que te voy a decir…
En esa época, hubieses pensado: “¡No! ¡No puede ser! ¡No puede haber cinco personas hablando al mismo tiempo con la voz de Dios! Uno de ellos debe ser el original y los otros cuatros seguramente son falsos”.
¿Por qué crees que pensabas así, querido ser humano?
Ni originales… ni falsos profetas
Porque era tu energía del momento la que no te permitía pensar de manera diferente, porque era tu sistema evolutivo el que no te permitía aceptar algo más…
Muy probablemente te hubieses preocupado por informarte acerca de saber quien era considerado “el original” y quienes podían haber sido “los falsos profetas”… ¡Ah! Pero eso ocurrió hace mucho tiempo… y tus zapatos ínterdimensionales - que están gastados - lo atestiguan… y si están gastados, tú sabes cuanto camino han recorrido…
Y tú, humano, sabes - por tu larga experiencia - de que ahora no ocurre lo mismo que ocurría antes. Ahora las cosas son diferentes…
Has escuchado una leyenda urbana, la has visto publicada en Internet… De hecho, cada milésima de segundo (Kryon chasquea tres veces los dedos) alguien publica una nueva leyenda urbana en Internet.
Cinco humanos hablando con una sola voz
Escuchaste que vendrían 5 humanos a hablar en nombre del Espíritu, pero estamos seguros de que nunca te cuestionaste… ¡si habría un original y cuatro falsos! ¿Por qué crees que eso pasó, mi querido? ¡Es muy simple! Porque tu nivel evolutivo - ése que ha ayudado a elevar el nivel evolutivo de la toda humanidad - ha originado en tu corazón la comprensión de que esto que está ocurriendo ahora es ínterdimensional. Por ello lo aceptas y lo comprendes sin cuestionarlo.
¿Qué queremos decir con ínterdimensional? Es muy simple: varias personas sentadas en una sola silla, hablando con una sola voz. ¿Humanos? Sí. ¿Expresándose con voz humana? Sí. Pero con un solo espíritu, un solo propósito y una sola conexión.
No habías visto algo así antes, no tenías experiencia de ello y sin embargo ¿por qué ahora lo aceptaste? Es muy simple, querido: ¡porque tú has cambiado! Porque ese largo recorrido que ha gastado la suela de tus zapatos ha logrado ese milagroso efecto.
Y así es como ese maravilloso e increíble ser humano mira a sus pies… ¿Y qué es lo que ve? Ve un maravilloso par de sucios y maltratados zapatos. “¡Oh, cuánto orgullo siento por ellos!” - dirías.
¡No lustres mis zapatos, por favor!
Creo que te sentirías mal si miraras hacia tus zapatos y los vieras relucir como nuevos, como si nunca los hubieses utilizado, ¿verdad? Muy probablemente ahora estés mirando de reojo - hacia la izquierda y la derecha de tu realidad de vida - para ver en qué estado están los zapatos de los demás. En realidad poca importa lo que veas, porque más bien es muy probable que tú hayas ayudado mucho a que los zapatos de otros también se hayan “ensuciado”…
Te voy a decir más… Quizás, si se te acercara una persona y te preguntara si puede lustrarte los zapatos, le dirías “¡No! ¡No toques mis zapatos! ¡Están muy bien así! Así los quiero”.
Qué extraño es este mundo espiritual, ¿verdad? Pero es así que nosotros nos valemos de la cotidianidad junto a ustedes y también podemos reírnos de ella junto a ustedes…
Querido humano, permíteme seguirte hablando acerca de los zapatos, pues creo que a partir de hoy, cuando dirijas tu mirada hacia tu calzado, ya no vas a sentir lo mismo que antes…
Tal como orgullosamente admiras y te sientes feliz por el estado en que se encuentran tus zapatos, ¿no te parece extraño que alguna vez hayas querido quitártelos definitivamente? Como se dice coloquialmente, pudiste haber dicho: “Voy a colgar mis zapatos”, lo cual significa que quisiste decir algo así como: “¡Renuncio!”.
Ah, probablemente esto haya ocurrido en alguna que otra época oscura de tu proceso evolutivo atemporal o de tu vida actual, tiempo en el cual, con sólo imaginarte que tendrías que ponerte esos zapatos y caminar con ellos… sentiste un absoluto rechazo. Más sin embargo - aunque tú no quisieras ponerte esos zapatos - irremediablemente siempre permanecieron delante de ti… al alcance de tu vista.
Qué asustador es no querer hacer algo y sin embargo, tener siempre - durante toda la vida - un permanente recordatorio. “No quiero, pero allí está… pues siento esa presión”.
Son tan viejos y se ven tan gastados… ¡pero son tan cómodos!
Seguramente debes hacer percibido que estos peculiares zapatos ínterdimensionales se sienten igual que un par de zapatos terrenales… ¿No te ha pasado - querido humano - que cuando posees un par de zapatos que amas mucho, no te importa que sean viejos y gastados? Te parecen tan cómodos… Al mirarlos, te dices o decías: “Cuánto he caminado con ellos… Se ven tan viejos y gastados… ¡pero no los voy a botar!”.
Y así es como tú, mi querido ser humano, te encuentras aquí hoy, en este lugar, simplemente contemplando con gran orgullo tus zapatos, porque sabes que una vez más ellos cumplieron su función, pues te trajeron hasta aquí.
Aquí ocurre lo que siempre ocurre cuando el ser humano está feliz: el ser humano corre y baila de alegría… pues muy contento viniste corriendo hacia este maravilloso encuentro que teníamos reservado para ti el día de hoy y el día de mañana (haciendo referencia al sábado 11 y al domingo 12 de abril de 2009).
¿A cuántos arrastraste contigo? Ya te oigo decir: “¡Pónganse sus zapatos! ¡Vamos nuevamente a caminar!”. Y así es como tú, ser humano, ayudas a otros a caminar… Antes de que tú le digas a otra persona adonde tiene que ir, procura decirle que posee un par de zapatos especiales. Dile que mire sus zapatos y que intente percibir la añoranza de esos tiempos en que los usó muchísimo. Dile que el propósito no es marcar una dirección a seguir. El propósito es… simplemente caminar.
Todo aquello que ustedes hacen en la vida es caminar, caminar y caminar… Durante ese largo caminar siempre hay lugares donde detenerse y donde conversar con otros… lugares donde se hace necesario realizar una parada. Por lo tanto, mi querido humano, no importa que te detengas en el camino alguna que otra vez. ¡Es bueno y necesario descansar!
De vez en cuando, dale un respiro a tus zapatos. Consérvalos con cariño y diles que cuando recuperes tu aliento o tu fe, los calzarás de nuevo para continuar el viaje.
Tu propia voz te recordó despertar…
Y así es como el ser humano se puso en marcha nuevamente, buscándose a sí mismo, necesitando oírse a sí mismo a través de otra voz. ¡Qué paradójico es que tú, humano, hayas colocado el despertador para ser despertado más adelante por tu misma voz! Y cuando tu propia voz te despierta, nunca la reconoces… pues crees que alguien más programó esa llamada para ti.
Sin embargo, estamos seguros de que tú estás aquí ahora porque decidiste usar tus zapatos y marcaste la hora correcta para llegar y despertarte aquí hoy… Estás ahora aquí oyéndonos, más poco importa este diálogo, pues lo que interesa es que sientas el llamado que hay para ti. Ese llamado es silencioso y solamente lo vas escuchar tú… en tu corazón. Ese llamado pudiera ser un recordatorio o un verdadero llamado a despertar para ponerte en marcha o simplemente representaría el consuelo de saber que te encuentras recorriendo el camino correcto, no el camino que otros esté siguiendo o marcando... sino tu propio camino, el camino que tus zapatos saber recorrer.
En vista de que tú, ser humano, escuchaste una leyenda urbana y te pusiste en camino, estás aquí ahora esperando sentir… o tal vez sintiéndolo todo. Estamos seguros de que tu corazón sabrá reconocer - a lo largo de estas horas que pasemos juntos - que todos los mensajes que irás a escuchar sean transmitidos por “la misma voz” (haciendo referencia a las otras canalizaciones que irían a ofrecer los otros voceros de Kryon)...
Aunque el canalizador se levante… ¡la silla permanece “ocupada”!
Esa voz proviene de “esta silla”, no de esta silla física, sino de una silla donde cada uno de estos voceros se sentará para que nosotros podamos brindarte aquello que vinimos a darte hoy…
Cuando este vocero se levante de esta silla… ¡nosotros seguiremos estando sentados aquí! ¡No lo olvides!
Queremos que tú sepas, mi querido humano, que valoramos muchísimo tu esfuerzo y tesón por haber acudido a escucharte a ti mismo. Agradecemos tu valor, tu confianza y te aseguramos que siempre estamos contigo, que tú nunca estás solo.
Yo no puedo despedirme de ustedes, porque en realidad no me voy a ninguna parte. Estaré aquí todo este tiempo junto a ustedes…
¿Sabes algo, querido humano? Yo también tengo mis zapatos y hoy me puse los mejores que tengo, especialmente para ti.
Bendito seas, ve en paz. Te bendecimos con mucho amor…
Y así es.
Kryon
Canalizado por Mario Liani
PARTE 2
12-04-2009
La segunda parte de esta canalización fue dada durante el segundo día (12 de abril) de la 2ª Conferencia Internacional de Kryon celebrada en Freiburg, Alemania, al final del evento - entre las 18:00 y las 19:00 horas - momento durante el cual se ofreció al público asistente una multi-canalización con los 5 canales de Kryon presentes físicamente (la primera que se haya hecho en Europa). Cada uno de ellos tuvo a disposición 10 minutos. Mario Liani fue el primero en canalizar, abriendo el discurso energético con lo que a continuación sigue…
La Voz de Kryon…
Nosotros somos Kryon, en Servicio Magnético para toda la Humanidad.
Y seguimos aquí… No nos hemos ido. Esto continúa…
Esto empezó hace mucho, no solamente hace dos días (haciendo referencia al comienzo del evento internacional de Kryon que comenzó el 11 de abril de 2009)…
Empezó mucho antes, querido humano. Empezó cuando tú manifestaste tu intención de estar aquí con nosotros, cuando anhelaste poder oír el mensaje que al final escuchaste durante estos dos días… porque el mensaje o los mensajes que escuchaste, fueron personales… estaban destinados sólo para ti.
Cinco humanos… y una sola voz
Te estábamos esperando. Estas sillas fueron calentadas por nosotros antes de que tú llegaras. Pero aunque tú no lo creas, ínterdimensionalmente tú también calentaste estas sillas… sin saberlo. Te ocupaste de darle amor y energía a este lugar que pronto te recibiría en tu plena humanidad, para sentirte algo más cerca… del Hogar.
Y así es como - desde tu silla - estás viendo a humanos sentados en otras sillas. Y aunque tus ojos humanos vean cinco sillas… no hay cinco sillas: hay UNA SOLA SILLA. Esta silla es única e ínterdimensional, porque aquí no hay cinco humanidades sentadas con una sola voluntad, con una sola intención.
Esta energía que ustedes y nosotros hemos creado es única, es muy especial, pues se nutre del sentido de la unión y la cooperación que hizo posible que nos integráramos para escuchar todo lo que teníamos que escuchar: el mensaje que proviene de ustedes hacia nosotros y el de nosotros hacia ustedes.
¿Te pusiste nuevamente tus viejos zapatos?
Porque cuando tú, humano, acudiste aquí a escuchar un mensaje canalizado… en realidad viniste a realizar un intercambio, donde tu parte humana se conectó con tu parte angelical y juntos pactaron la necesidad de comunicarse mutuamente.
Es así como ese ser humano viene al encuentro de sí mismo… sin saberlo. Es apenas tu intuición la que te puso en marcha… Son apenas los zapatos que usaste en este viaje, los que te recordaron que era hora de ponerte en marcha.
La melodía del amor y la compasión infinita
Aquí estás sentado, sintiendo la energía de una sola silla, sintiendo la voz que canta una sola melodía: la del amor y la compasión infinita. Es la melodía que tú necesitabas oír y recuperar para sentir que estás en casa. La voz que estás escuchando es tu propia voz, amplificada a una cifra numéricamente imposible de cuantificar… pero es tu propia voz.
Con tu propia voz, mi querido humano, te digo lo siguiente: esta silla que tú estás viendo, tiene un nombre y su nombre es INTEGRIDAD. Es la integridad que hace falta para emprender “El Camino”, porque ningún camino sin integridad ni corazón… se puede recorrer completamente.
Un camino con integridad
Observa la integridad que hay a tu alrededor, recuerda la integridad que pudo haber revestido tus actos y pregúntate en qué momentos sentiste haberte conducido a través de esa poderosa energía. Es “integridad” lo que te hace saber o sentir que no importa lo que digan o comenten de ti… mientras sientas que estás en el camino correcto. Es “integridad” aquello que nos pone (a todos, ustedes y nosotros) en el camino de la búsqueda constante de nuestra propia verdad, pues nuestra propia verdad necesita de nuestra propia integridad.
Nosotros vemos y sentimos tu propia integridad, te amamos por ello y te bendecimos, mi querido ser humano. ¡Oh cuánto, cuánto te amamos! Es por eso que hoy estamos aquí, seguimos aquí a tus pies… y todavía no nos hemos ido.
…Y esto continúa (haciendo referencia a los siguiente canales de Kryon que tomarían sucesivamente la palabra), porque quiero que sepan que en la ínterdimensionalidad no hay despedidas.
Y es así como - a pesar de que la energía de Kryon pasa de una voz humana a otra - ella sigue conteniendo y evocando la misma amorosa energía: la voz de Kryon que sigue resonando en tu corazón…
Kryon
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